Naturgy echó mano de un bufete de abogados para forzar a una consumidora a pagar 127 euros por un servicio del que ella se había dado de baja, alegando que este se había renovado por un año. Sin embargo, y como se demostraría, las condiciones de pago y renovación nunca habían estado claras. Los intermediarios recurrieron a sus tácticas intimidatorias habituales. Pero, tras poner su caso en manos de FACUA Sevilla, ha visto cancelada la deuda.
Cristina Bascón Lara no estaba contenta con la que desde 2016 era su compañía energética, Naturgy. A finales de 2019 encontró mejores condiciones en otra empresa, y se cambió. Más tarde le llegaba una factura de 127 euros por el concepto "Servigas Complet", un seguro de mantenimiento y reparaciones de la instalación de gas, correspondiente a un tiempo posterior a su baja.
Cuando consiguió contactar con atención al cliente, alegaron que ya le habían renovado esa funcionalidad, antes de darse ella de baja. Y que, si bien el contrato es anual, se fracciona en las sucesivas facturas mensuales. En definitiva, su año de mantenimiento había empezado a contar desde noviembre de 2019, así que aún le quedaban por liquidar 10 meses.
¿Pagar por un servicio no recibido?
"A mí no me explicaron nunca que fuera un contrato anual", protesta. "De hecho, ni siquiera me hicieron llegar nunca el contrato por escrito. Lo que sí recuerdo es que, allá por 2016, fui respondiendo 'sí' o 'no' a las preguntas de la operadora telefónica". Considerando que al darse de baja de Naturgy lo hacía de todos sus servicios, la afectada no dudó en devolver la factura.
El asunto parecía zanjado. Sin embargo, casi un año más tarde, Cristina recibía un correo de un bufete de abogados. A partir de ahí, llamadas y SMS con el mismo mensaje intimidatorio: o pagaba los 127 euros o la llevarían a juicio, y entonces tendría que pagar mucho más, etc. Pero ella no se sintió demasiado amedrentada: es socia de FACUA Sevilla.
"Da bastante tranquilidad, claro. FACUA controla más, nosotros los consumidores nos perdemos. Tenemos mucho más difícil contactar con las empresas, que ponen muy difícil hablar con alguien para reclamar".
La respuesta de Naturgy: más intimidaciones
Así pues, la asociación sevillana interpuso la correspondiente reclamación, en la que recordaba, en relación al supuesto fraccionamiento del pago que alegaba Naturgy, que "antes de contratar, el empresario deberá poner a disposición del consumidor y usuario de forma clara, comprensible y adaptada a las circunstancias la información relevante, veraz y suficiente sobre las características esenciales del contrato", de acuerdo con el artículo 60 la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios.
Como en los anteriores intentos, nuevas amenazas como respuesta, esta vez con algo tan disparatado como cortarle la luz: Naturgy no le prestaba ya ningún servicio y, cuando lo había hecho, había sido el gas, no la electricidad. En todo caso, y reiterada la reclamación a la empresa energética, esta ha transigido recientemente en dejar de acosar a la afectada. "Se tarda, sí. En este caso ha llevado más de dos años, pero está claro que merece la pena organizarse para que te dejen de molestar de esta manera por 127 euros", cierra, satisfecha, la socia.