Estas últimas semanas gran parte de los medios de comunicación se han hecho eco de un hecho de los que, como dice el dicho popular, "no se sabe si es mejor reír o llorar".
Los medios han relatado que toda una serie de trenes totalmente nuevos, cuya producción se había encargado para transitar por Asturias y Cantabria, por una nada desdeñable cantidad de dinero público, no podían ser fabricados ya que no valdrían para cubrir los trayectos previstos.
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