El Tribunal Supremo alemán ha dictaminado este lunes que el fabricante automovilístico Volkswagen (VW) deberá indemnizar a un comprador afectado por el escándalo de la manipulación de emisiones contaminantes conocido como dieselgate.
Aunque se trata de una demanda individual, la sentencia sienta precedente al haber sido dictada por el alto tribunal alemán y al reconocer el derecho de indemnización a los compradores.
Según el fallo, el comprador puede exigir el reembolso de parte del precio que pagó por su vehículo, del que deberá descontar los kilómetros recorridos, es decir, el "uso" dado al mismo.
La denuncia la interpuso el propietario de un VW fabricado en 2014, y adquirido de segunda mano, que exigía al fabricante la devolución integral del precio inicial del vehículo, 31.500 euros, por un "daño moral deliberado".
Volkswagen argumentaba que el vehículo pudo ser empleado en todo momento por su propietario, por lo que no corresponde pagar indemnización alguna.